viernes, 7 de noviembre de 2008

Hoy un buen amigo mío está atado...

...haciendo honor con su experiencia al nombre de nuestro blog: ingreso involuntario.

No hay duda está agitado, no lo dudo está parana, no me extrañaría que agrediera mucho verbalmente, si me extrañaría que agrediera físicamente. Y es que ser esquizoafectivo y fumarse 3 pavitas no se llevan muy bien.

Es poco profesional sentirse amigo de tus pacientes, es poco profesional sentir afecto por ellos, pero lo que más me subleva es que dónde se supone que por lo menos debería hacerse un buen trato, el más profesional, sea otro ambiente rechazante más.

Ponte bien CD!

1 comentario:

Jordy dijo...

Yo no creo que sea poco profesional eso que expresas, Javi. Es más es un tema que me tiene pensando desde hace mucho tiempo, lo de la posición ante el paciente. En la práctica creo que lo voy teniendo claro, pero me resulta dificil ponerlo en palabras. Sería como un "estar profesional".

Me explico, un "estar" porque si no estas de verdad presente implicandote emocional y personalmente, dejas sólo a tu paciente y creo que le engañas y te engañas a ti mismo. Por otro lado, pienso que a la vez hay que tener presente que es nuestro trabajo, y nos pagan por ello, para que nos utilicen hasta cierto punto pensando en cada momento lo que es mejor para ellos, lo que les puede servir, lo que puede ayudarles...(que es algo que con tus amigos no es tanto, con ellos piensas también en ti mismo y tus necesidades de todo tipo). Si no tenemos claro esto último podemos comenzar a utilizar consciente o inconscientemente a nuestros pacientes para cubrir nuestras necesidades (de amistad, de reconocimiento, etc.) y hacerles poco favor.

Sería algo así como "mantener tu centro", sabiendo quien eres, que estas para ayudar mientras estas trabajando, pero que no vas a poder dar lo que no tienes (por eso creo que es vital en este oficio cuidarse uno y parase de vez en cuando a ver si ha perdido su sitio, tironeado por mil influencias emocionales y por la propia historia personal, ya que es facilísimo sin darse cuenta verse de pronto "fuera de juego", y tengo la intuición de que en ese caso lo que lo sufre es uno mismo y sus pacientes)